Estos
últimos días veo que por fin se están dando cuenta de la puntita del iceberg
que asoma en la economía de este país. Me refiero a los fondos buitres. Como le
he dicho tan solo es la puntita. Su negocio, aunque es muy rentable para los
edificios y viviendas de alquiler es relativamente finito. Ya se va viendo otro
que es mucho mas ventajoso, la compra de hospitales y otros servicios públicos,
que ya saneados, estos inversores anhelan con su máxima avidez por ser su plazo
fijo durante largo tiempo. No voy a entrar a valorar el riesgo que supone para
esta sociedad que un inversor al que ni conocemos y que no sabemos como ha
generado esos bienes para invertir pueda tener el control sobre quien debe vivir
o morir en función de su cuenta corriente.
Su
negocio brutal aún no ha sido sacado a la luz. Es un negocio que está
convirtiendo silenciosamente en esclavos económicos de estos fondos a todos
aquellos a quienes la crisis les ha incluso rozado. Como una garrapata y con el
beneplácito del Gobierno y estamentos financieros y judiciales, están dejando
que chupen y estrujen lo poco que nos queda de sangre. Y con la interpretación
de las leyes no solo a quien tuvo el infortunio de endeudarse, también para sus
generaciones posteriores por ley.
Para
concretar, sin ser tan metafórico. Los bancos para evitar en sus cuentas
anuales una fea visión en sus balances, los pasivos de los incobrables, venden
a estos fondos las deudas por un ínfimo porcentaje. Según el artículo del CC.
1535 el consumidor final ( se entiende como consumidor persona física o
jurídica) tiene derecho a conocer el precio por el que se vendío su deuda y a
ejercer el retracto. Este retracto no es más que el pago del valor de la deuda
por el que el fondo buitre compró al banco ( como ejemplo, de una deuda de una
tarjeta de crédito de 1.000€ puede pagar entre 10 y 20 €) añadiendo los costes
judiciales. Si no recuerdo mal, este artículo del CC. viene de finales del
S.XIX para evitar la especulación y la usura en nuestro bien amado sistema financiero.
Cualquiera
que lea este artículo y argumente el espíritu del mismo, entiende por sentido
común, que no debería tener mayores problemas para que en un juzgado no se le
pudiese reclamar más que la deuda que realmente ha pagado el buitre más las
costas judiciales. Pues bien, estos fondos ha ideado una treta. Se denomina compra
en globo. Consiste en que la entidad financiera hace un paquete de
deuda que vende al fondo buitre. Los costes están en los mismos valores
porcentuales, es decir, que realizan los sumatorios de muchas deudas de
distintas procedencias y aplican esos descuentos brutales respecto de la deuda
original. De esta manera, la argumentación que el consumidor realiza ante un
juzgado para conocer el precio real de lo que se ha pagado por su deuda y poder
ejercer su derecho al retracto, queda anulada. El fondo alude a que al
realizarse una compra en globo desconoce el valor real de lo que pagó por su
deuda. Sería muy sencillo de estimar por una simple prorrata, esos quebrados
que nos enseñaban en la EGB. Así cualquier consumidor podría beneficiarse de
esas quitas, liquidar sus deudas de curiosamente, entidades a las que el propio
consumidor ha rescatado y a las que no les puede exigir que les devuelva esos
65.000 millones de euros que aún se adeudan.
Pero
lo peor está por llegar. Increiblemente los jueces (aunque después de ver
ciertas sentencias ya no hay tal capacidad de asombro) están dando a la razón a
estos fondos, condenando a los consumidores al pago total de la deuda. Una
justificación esgrimida en que el pago, por estar agrupado en una compra en
globo no se puede determinar su coste. Es decir, si un fondo ha comprado un
paquete por una cantidad puede rentabilizarla en mas de 900 veces su valor con
el beneplácito de la justicia. Justicia que se salta a la torera el artículo
del CC 1535 aniquilando los derechos del consumidor. Y casualmente, aunque no
creo en ellas, adivine en que país de la Unión Europea sucede. Si, en ese que Is different.
En
ningún otro país de le UE de esos en los que nos gusta tener como referentes, se
está permitiendo este tipo de actuación por que tienen muy claro que el derecho del consumidor
está primero que cualquier derecho mercantil. Quizás también por que la cultura
democrática es mucho mas profunda, la presión social y los medios hacen dimitir
a políticos corruptos pillados in fraganti. Puede que los famosos lobbies, que
suelen acompañar a los fondos buitres, estén silenciando estos hechos para
relajar de presión a los políticos y gobernantes responsables de estas
actuaciones.
Y
aunque vuelva a ponerme metáforico e incluso alegórico, lo que está sucediendo
y lo que supone permitir este tipo de sentencias ( a mi modo de ver no
ajustadas a derecho) es que se esté refeudalizando el sistema económico y
social de este país, con la permisividad de los nuevos gobernantes o señores
feudales. El consumidor y su descendencia, con sus escasos bienes y los que
puedan legar a sus hijos, pasan a ser vasallos económicos de por vida de sus
nuevos señores. Los que contrajeron sus deudas con sus escasos bienes y con sus
nóminas. Con esa parte inermbargable de unos 740€ parece protegerse al nuevo
vasallo. ¿Pero que pasa con todo el excedente? Económicamente el sobrante irá,
a saber por cuanto tiempo quizás una cadena perpetua, a engrosar la bolsa del
fondo buitre. Socialmente un conformismo a que un vasallo no pida aumento de sueldo
pues sabe que se le va a embargar. Y la repercusión para los gobernantes es que
evitarán que hay movimientos de agitación de la plebe dado que su
desmoralización evitará que se pidan aumentos de sueldo o pensiones. Es la
cuadratura del círculo. Bueno solo queda la educación. Quizás no sea una
casualidad el desprestigio de la enseñanza pública.
Como
en todas las historias siempre hay un Robin Hood. Un juzgado de las tierras
independentisas (gracias a Dios por esa libertad de pensamiento) ha decidido no
fallar por el momento a la espera de que el nuevo papado europeo, el tribunal
de Estrasburgo, se pronuncie sobre que artículos tanto del este reino como del
europeo prevalece. Esperemos que la gracia divina ilumine a los jueces del
Norte y comience un nuevo renacimiento moral.
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